Antes de nada, explicaremos que es el incumplimiento de contrato, ya que hay varios tipos de incumplimiento:
El incumplimiento de contrato empieza cuando una de las 2 partes no cumple con lo establecido en el pacto.
Puede definirse como cualquier fallo de realización o de buena realización de una o alguna obligación contractual, ya sea esta falta en la realización con falta o sin falta de una de las partes. Con carácter general, valorando el contenido de la obligación y que vendrá determinado en el propio contrato.
Para exigir un incumplimiento de contrato, procederemos a realizar 3 pasos:
Al hilo de la definición de incumplimiento de contrato, se puede aplicar a todo tipo de contratos, no solo a contratos de compraventa, teniendo en común para todos ellos que el incumplimiento del contrato vendría a ser una falta de realización de las obligaciones contenidas, la no entrega de lo acordado, el impago, o incluso, puede determinar el incumplimiento del contrato las actuaciones llevadas a cabo en contra del contenido del contrato.
La ejecución tardía de las obligaciones contenidas en el contrato, incluso las que se realizan de manera anticipada, determinan igualmente que se esté ante un incumplimiento de contrato.
El incumplimiento de contrato también puede venir dado por un cumplimiento defectuoso de las obligaciones contenidas, entrando en esta modalidad un amplio abanico de supuestos sobre aspectos cuantitativos, cualitativos, de funcionalidad de la prestación, …lo que se denomina “falta de conformidad”.
Estos son los casos que nos encontramos con más frecuencia en nuestro despacho:
Incumplimiento del reconocimiento de deuda.Los contratos o documentos de reconocimiento de deuda se hacen, en la mayor parte de las veces, para evitar gastos judiciales.
Existe una Propuesta de Reglamento Europeo de Compraventa por el que la reparación de los daños opera de manera diferente según el comprador sea consumidor o comerciante, aspecto novedoso. Con ello, se pretende unificar el derecho de compraventa dentro de la Unión Europea.
El incumplimiento del contrato comercial se produce cuando una empresa no cumple con lo establecido en un acuerdo contractual con otra empresa.
Las razones más comunes para estas infracciones son las siguientes:
1. La falta de entrega de un producto a tiempo o la prestación de un servicio erróneo.
2. Si no se realiza el pago de bienes o servicios.
3. El no poder completar una tarea, como la finalización de un proyecto en un plazo acordado
4. El incumplimiento de los términos acordados en la transferencia de un negocio.
Podemos encontrar tres situaciones diferentes en función del tiempo en el que se produzca el cumplimiento de las obligaciones:
La consecuencia jurídica del retraso es que el deudor sigue obligado a cumplir, aunque puede reconocerse también una indemnización por daños y perjuicios si hay un retraso culpable o este no sea por falta de liquidez.
Obliga al deudor a cumplir la obligación y al abono de los daños y perjuicios causados.
Puede dar lugar a dos opciones, exigir el cumplimiento o resolver el contrato. En cualquiera de las dos opciones se puede solicitar el abono de intereses e indemnización por daños y perjuicios.
Y digan lo que digan, es posible reclamar daños y perjuicios por incumplimiento contractual. El artículo 1.124 del Código Civil prevé ante el incumplimiento de contrato, solicitar el cumplimiento del contrato, o bien, su resolución con el abono de daños y perjuicios, junto con los intereses.
Reclamación de cantidad
Antes de iniciar un procedimiento judicial, resulta muy recomendable intentar llegar a un acuerdo con el deudor para que éste pueda liquidar su deuda. Pero que esta vía evite el paso por un juzgado no significa que no deba llevarse a cabo a través de un abogado, ya que el concurso de un profesional del derecho va a garantizar que la reclamación se haga de la mejor manera posible. En muchas ocasiones y a la vista del primer requerimiento efectuado por un bufete de abogados se consigue conducir el pago de una forma extrajudicial y rápida.
Reclamaciones de cantidad por la vía extrajudicial o amistosa
Reclamación de cantidad por vía legal
El procedimiento monitorio es un proceso judicial ágil, sencillo y eficaz para cantidades no controvertidas inferiores a 30.000 €. Para reclamar mediante este proceso, debemos estar ante una deuda dineraria, líquida, vencida, exigible y acreditada mediante documento. El procedimiento monitorio resulta muy útil para empresarios
Con más razón aún se hace indispensable el concurso de un abogado en el caso de que los acreedores alcen sus pagos y se haga necesario reclamar los importes adeudados por vías judiciales al objeto de reintegrar al patrimonio personal o empresarial. En BFP Abogados contamos con un equipo de letrados especializados en reclamaciones de impagados que sabrán elegir la estrategia más adecuada y conducir del modo más satisfactorio los procedimientos de reclamación.
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